martes, 13 de febrero de 2024

Martes y trece

 No soy supersticioso. no creo en ninguna chorrada que me vaya a hacer tener un mejor o peor día, y no te cuento lo poco que me afecta en mi vida lo que me deparen los astros...

Pero hoy me ha tocado. Hoy es martes y trece y se ha juntado un montón de mierda para caer encima de mi a paladas. ¿Casualidad?. 
El día empezó regular. Y he contado aquí que yo no me visto pensando ni buscando combinaciones de colores. Yo me visto por orden. La ropa limpia entra en el armario por la izquierda y yo me pongo lo que esté más a la derecha. Se crea así una rotación perfecta en la que toda la ropa se desgasta por igual. No hay prendas "favoritas" ni cosas que no me pongo. Cuando toca algo te lo pones. Y listo. Hay que comprar con tiento eso si. Colores neutros y sin estridencias. Pero a veces hay mala suerte. Hoy cuando La Parienta me ha visto salir de la habitación, recién vestido, a mirado al cielo y ha murmurado por lo bajinis. la verdad es que hoy yo mismo me he dado cuenta que iba un poco...descompasado... Vamos, la combinación camisa jersey era la que aquí os dejo:



Que la verdad hace un poco de daño a la vista. Pero es lo que toca. y un sistema funciona si no hay excepciones. 

Así que me lancé a la calle.

Después de comerme hora y media larga de coche, para ver a un pelma al que llevo meses explicándole lo que tengo que hacer, llego y el pelma esta jodido, se ha hecho una torcedura y no puede currar. Muy bien. ¿Y si te hiciste la torcedura hace dos días, pedazo de hijo de puta, no podías habérmelo dicho ayer o antesdeayer? . Pues no, ha esperado a que llegara allí (143 Km desde mi casa) para decirme que lo dejábamos para otro día. 

Y luego ha empezado a llover.

Como ya me la sudaba todo, me he hecho 50 Km más para por lo menos comer bien. En un garito que me habían recomendado. Estoy desde que empezó el año pasando hambre. En aras de que la cifra de en medio vuelva a ser un cero, desayuno, como...y hasta el día siguiente. Y además sólo dos cafés al día y la comida sin postre. 

Con esa tristeza de vida los kilos van bajando. Poco a poco, si, pero van bajando.

Hoy, al acabar de comer, he dicho que con la mierda de día que llevaba me había ganado un postre. Y además he oído que tenían brownie de chocolate...me lo merezco. Lo he pedido...

¡Me lo han traído con sirope de fresa por encima! ¿Brownie con sirope de fresa? ¿estamos locos?

Menos mal, que La Parienta me ha mandado un enlace con la reposición del documental "Una ambición desmedida", lo ponen en un ciclo el miércoles y yo me había quedado sin verlo. Saco la entrada a toda leche. Justo al acabar me llama un compi al que le tengo que ir a echar una mano el mismo día del documental,,,a 250 Km de casa, me da que no llego a tiempo.

Cuando me estoy cagando en todo, me llama La Parienta que le han puesto una reunión a última hora de la tarde de hoy martes. ¿Y que pasa?, pues veréis, La Parienta no curra ni martes ni jueves por la tarde. Así que a mi me toca hacer la cena lunes y miércoles (aunque no ceno, ojo) y a ella martes y jueves. Si tiene reunión a última hora un día que no le toca hacer la cena...¿seré capaz de no hacer la cena y esperar a que vuelva y se haga la cena y decirle que hoy le toca a ella?

No hay derecho. Puto martes y trece.


miércoles, 17 de enero de 2024

Oiga disculpe...eso no es un podcast. Poniendo un poco de orden.

 

Dice Juan Gómez Jurado en su último libro que todo español lleva dentro un podcast pero a nadie le apetece escucharlo. En gran parte es verdad. Han proliferado los podcast como las setas, hay miles. Hace años escribí aquí un post de podcast que oía. Porque los que hacemos horas de coche, el podcast nos salva la vida. Pero ahora sólo el hecho de buscar un podcast es horrible. Y no porque sean buenos o malos. Es que hay muchísima mierda que colocan como podcast y no es un podcast. Así que voy a poner un poco de orden en qué es y qué no es un podcast. Básicamente, podéis seguir estos consejos para seleccionar podcast que oir. Si no cumplen estas normas, no los oigáis. Por en medio os pondré algunos de los mejores que he oído últimamente.

Lo primero es la plataforma. Yo no sé porque todos quieren venderte su plataforma, debe ser que ahí está lo mollar…pues bien, usadlo a la inversa. Si no está en alguna de las generalistas (Spotify, IVox…) no os molestéis, seguro que no merece la pena.

Los podcast se dividen básicamente en dos tipos. Ficción y no ficción. Vamos a empezar con los de no ficción.

Vamos a ver, un podcast no es un programa de radio en diferido, ni un escuchar después algo emitido. Un podcast, para que merezca la pena oírlo, tiene que ser algo creado única y exclusivamente para oírlo en modo podcast. Si lo que os ofrecen es un refrito de programa de radio, un programa que lo mismo sale en formato podcast, que en YouTube que en actuaciones en directo…Huid. Eso no es un podcast y no os enganchará como tal.

Pongamos que ya hemos encontrado algo que merece la pena oír, o eso parece. Vale pues hay dos tipos de podcast de no ficción. Lo de investigación y los de conversación.

Los de investigación son los que te cuentan una historia, con principio y final. Hay muy buenos y quizá es el mejor ejemplo de lo que es un podcast. Os recomiendo muy vivamente “El Guerrillero” de Almudena Ariza, “El puzle Voynich”, “El enemigo. El crimen de la viuda de la CAM”, “Saludos cordiales”… son ejemplos de buenísimos podcast de investigación.

De los de tipo conversación, hay dos máximas que se deben respetar. La primera es que un podcast tiene que tener edición. No es juntarse a hablar dos personas sin guion ni orden (no os imagináis la de podcast que son eso, chorradas dichas por gente sin vergüenza ni criterio). Y además hay que tener un argumento que los sustente. A mí de este tipo la verdad es que hay muy pocos que me enganchen, casi todos son mierdas con ínfulas de ser un programa de radio. Y menos aún cutre entrevistas hechas por un inculto a alguien que hace propaganda…La verdad es que ya sólo sigo el de “Aquí hay dragones” que es un pedazo de podcast donde oyes conversar a gente muy interesante.

Y llegamos a los podcast de ficción. Aquí no hay tanto lío, en general están bastante bien hechos. Otra cosa es que te guste o no el tema. Hay que hacer, eso sí, una distinción. Un podcast no es un audiolibro. No vale con leer una historia. Hay que representarla. Si hay tres protas, tienes que tener tres voces diferentes, no vale diferenciarlos por los nombres como en los libros. Y los efectos de sonido, hay que modularlos con el diálogo. Un ejemplo de cómo no hacer un podcast de ficción es Biotopia, imposible de seguir. Si queréis oír dos buenísimos podcast de ficción os recomiendo “El tigre” y “Titania”. Lo que pasa es que los podcas de ficción acaban cargándoselos…metiendo temporadas de más.

lunes, 11 de diciembre de 2023

Abro reto

 Se ha convertido en una obsesión. Un continuo pedirselo a la gente. Familia, amigos, conocidos, compañeros del curro...

Así que tenía que traerlo aquí. Sin explicación ni aclaración. En bruto. os animo a retrataros.

Con todos vosotros el resumen de mi año en Spotify



martes, 21 de noviembre de 2023

A ti que nunca leíste mi blog. Ni falta que te hacía. "Y además no se que sacáis de esas chorradas de los blogs"

 

No quiero que nadie más consuele a viudas repentinas. Ni quiero que hagan panegíricos de gente a la que aún le quedaba tanto por vivir. No quiero ver lo bien que crecen tus hijos y no poder comentarlo contigo.

No quiero que se muera ninguno más de mis amigos. Porque nunca les he dicho lo que les quiero. Y la falta que me hacen. Porque aún me quedan muchas llamadas que hacer. Porque aún tengo muchas dudas que resolver.

Y ahora, si ya no estás tú, siempre nos va a faltar una opinión. Moderada y distante. A veces fría, a veces muy lúcida.

Una vez cuando yo tenía dudas sobre algo de lo que estaba haciendo con mis hijos, cortaste diciendo “Lo mejor para los hijos siempre es lo que deciden los padres, que son los que más les quieren”. Nunca te dije la de veces que use esa frase para tranquilizarme.

Nunca más vamos a volver a estar todos juntos. Ya nadie sabrá de música clásica. Ni defenderá conmigo a Javier Marías. Ya no intercambiaré Podcast con nadie. Ni nos enseñaremos las plumas de nuestra colección.

“Ni se te ocurra cambiar el embrague del coche”. También tenías razón, han pasado dos años y el coche funciona perfectamente.

Sin ti seremos menos sabios. Intentaremos ser igual de alegres. Pero, por favor, que no se muera ninguno más de mis amigos. Que aún no nos toca.

miércoles, 8 de noviembre de 2023

Donde la carretera me lleve - y 5

 Los primeros kilómetros de un viaje en moto siempre son de nervios. No sabes si pese a todo lo que has organizado, la moto estará bien. No sabes si el macuto que has puesto en el asiento de atrás se sostendrá durante el viaje sin moverse, si la ropa que llevas, pensando en el calor o en el frío será la adecuada, si de repente fallará cualquier chorrada con la que no contabas...

Luego te relajas, va todo bien, vas cómodo, no te mueres por las condiciones del clima, no hay ningún ruido raro y no te pica la nariz (rascarse la nariz, quitarte una pelusa del ojo o arreglarte una arruga de la ropa se convierten en una moto, con el casco y los guantes, en un incordio muy importante). Y entonces, seguramente después de pararte al primer café, empiezas a disfrutar.

Es muy difícil explicar lo que se siente en una moto, en un viaje en moto, para quien no lo ha hecho nunca. Para empezar en una moto tienes que ir concentrado al 100%. En el coche puedes ir conduciendo, hablando por teléfono y fumando todo a la vez. Pero en moto no. En la moto vas pensando en la salida de la curva, en como entras en la siguiente, en vigilar por los retrovisores y en mil cosas más. No te puedes descuidar, no te puedes relajar. Por eso los viajes en moto son de 400-500Km al día máximo. y eso con varias paradas. Por si eso fuera poco, en moto tienes una visión mucho más amplia que en coche. Casi ves los 180º a tu alrededor. Y todo huele muchísimo. Notas el olor de las plantas a la orilla de la carretera, notas el cambio de un grado de temperatura al entrar en una sombra, notas la rugosidad del asfalto...

Y con todo y eso, llegue al Burgo de Osma feliz. De allí a San Esteban de Gormaz, Peñafiel, Cuellar, Iscar,,,todo carreteras secundarias, con poco tráfico. Bien es verdad que la ruta de los caballeros resultaba un poco aburrida. Los caballeros viajaban en linea recta, sin rodear nada. De frente. Rectas infinitas de Castilla, hoy rodeadas de bodegas horteras de diseño. Creo que en esa ruta se ha blanqueado la mitad del dinero negro de España a base de hacer bodegas.

Tuve que parar un rato en Olmedo. Era la parte de más calor del día. Y por encima de 32º ir en moto es sofocante. Cuando bebí y recuperé, seguí. Mala suerte entre olmedo y Martin Muñoz de las Posadas. La recta infinita estaba en obras... Llegue a Adanero y a partir de ahí a dormir a El Espinar por la N-VI. Inocente de mi, pensaba que los madrileños se irían por la autopista de peaje. Se ve que no les mola. 
Tras dormir en un hotel de carretera, sin más, salí por la mañana a coger la N110 en Villacastin.

Y aquello fue maravilloso.

Disfrute de esa carretera más de lo que había pensado, el paisaje era mejor de lo que imaginé, la ruta era maravillosa. Cuando entraba de vuelta en San Esteban de Gormaz, empezaba a apretar el calor. Apuré hasta llegar a casa a primera hora de la tarde, ya con demasiado calor.

Me baje de la moto exhausto, sudando y cansado. Pero feliz. Y antes de subir a casa, en el garaje, me agache y le plante un beso a mi moto en el depósito.

Se lo había ganado. 

martes, 24 de octubre de 2023

Donde la carretera me lleve - 4

 

Para buscar el viaje de ida, hasta llegar a la N110, me puse a rebuscar en los archivos de la Sherman’s Motoclub Brotherhood a ver si encontraba una ruta curiosa. Y encontré algo sorprendente. Os lo cuento aquí resumido.

Resulta que en España fue poca gente a las cruzadas. Las cruzadas eran guerras sobre todo de pijos europeos que no tenían donde combatir. Pero en España siempre hemos tenido guerras suficientes para nosotros y para más que hubiere…Salvo a principios del siglo XV.

A principios del siglo XV, con Al Andalus cercada y ya al borde del desastre, empezó a haber caballeros ociosos en el norte de España. Y hasta allí llegaron las noticias de una especie de cruzada que había en Europa. Así que unos cuantos jovencillos castellanos decidieron alistarse. Y entraron como caballeros en el ejército de Juana de Arco. Juana de Arco tiene una historia suficientemente complicada como para que os la leáis por vuestra cuenta sin que intente yo explicarla aquí. Resumamos mucho diciendo que era francesa, capitaneo una tropa frente a los ingleses en la guerra de los cien años. Cuando los franceses las pasaban muy putas y los ingleses ya estaban en terreno continental bastante asentados, ella le dio la vuelta a la tortilla…pese a que la acabaron matando los propios franceses. Además de ser una cría (16 años tenía) decía recibir visitas de media corte celestial. No se sabe bien si era anoréxica o tomaba drogas. Pero ahí está. Y es Santa y todo según la Iglesia Católica. Y la veneran mucho los franceses, si, los que la mataron…

Total que los señoritos castellanos fueron a luchar con ella. Con todas las ganas. Pero cuando llegaron allí y vieron que la batalla más que a lanzadas en el campo, era a puñaladas en las reuniones, volvieron a Valladolid diciendo que aquello era un cachondeo y que a la Pucela (doncella en francés) no había quien la entendiese. Se corrieron una farra en Valladolid que todos comentaron, la farra de los de la Pucela, de ahí les viene el nombre de pucelanos a los de Valladolid…

En los registros de la historia de los Sherman’s viene la ruta de los caballeros así como la de otro de Valladolid que acabó casado, por aquella época, con una princesa de Samarcanda. Pero eso lo cuento otro día. El tema es que tanto en la expedición de los pucelanos como en la de el de Samarcanda, viajaba gente de la hermandad que dio lugar a los Sherman’s, y me hacía ilusión  hacer a la ida esa ruta. La ruta de los caballeros.

martes, 17 de octubre de 2023

Donde la carretera me lleve - 3

 

Tocaba pues elegir ruta, dado que había que elegir donde dormir. Más o menos tenía clara la ruta de vuelta, quedaba elegir la de ida.

La ruta de vuelta iba a ser la ruta madre de España. Pero ¿qué es una ruta madre?. La ruta madre es una definición que se le da a determinadas carreteras. Son carreteras que han tenido una influencia muy clara en un momento concreto de la historia de un país. Suelen ser producto de una transformación económica. Hay rutas madre muy conocidas: la ruta 66 en Estados Unidos, la ruta 6 en Irlanda…Siempre hay y siempre habrá. Hoy la vía de “La Bestia”, el ferrocarril que atraviesa México para llegar a Estados Unidos es una ruta madre.

En España tenemos nuestra ruta madre. El ganado merino (el que producía la mejor lana del mundo) y su explotación fueron claves en el desarrollo con de España. El comercio con Flandes, la moneda llamada “Vellón” (por el vellón de lana que se produce al esquilar)…todo son restos de la explotación del merino.

La explotación de cualquier ganado ovino va ligada al campo. Y en muchos casos implica una trashumancia, más o menos larga. El merino español tenía una ruta trashumante por encima de todas. Entre todas las mestas, cañadas y rutas la principal fue la cañada Plasencia – San Esteban de Gormaz. Las ovejas pasaban el invierno en Extremadura y en verano subían a Soria. El movimiento de esos animales fue clave en la articulación de España a partir del siglo XIII.

Por cierto, un inciso curioso. En la reconquista la zona que limitaba con la España mora, los cristianos le llamaban “la Extremadura”, era el extremo de su reino. Soria, durante mucho tiempo, fue Extremadura, porque era el límite con el Aragón musulmán y el lema de la ciudad era “Soria pura cabeza de Extremadura”.

La última Extremadura que quedó fue la actual región de Extremadura que era el límite con Al Ándalus. Cuando se conquistó Al Ándalus, no paso a llamarse Extremadura, porque más allá sólo estaba el mar.

La mesta del merino fue evolucionando a camino, camino real y finalmente carretera. Es la actual carretera N-110 que sigue siendo la carretera que va de Plasencia a San Esteban de Gormaz y es posiblemente la carretera más bonita de España.

Los sucesivos responsables de infraestructuras de España están convencidísimos de que toda carretera ha de acabar siendo una autovía. Algo absurdo. Una carretera sólo ha de ser autovía cuando tiene una cantidad de tráfico medio diario que lo justifique. No para evitar aglomeraciones en momentos puntuales. Muchas carreteras bien asfaltadas, bien señalizadas y con las oportunas circunvalaciones de los núcleos habitados, no deberían de hacerse nunca autovía.

Ese afán de hacer autovías está a punto de matar la N-110. Sin ninguna necesidad ni justificación han empezado a hacerla autovía.

Como es lógico, el ganado trashumante llevaba una ruta condicionada por su propia idiosincrasia. Así la N-110 que conserva ese trazado, va por la cara norte del Guadarrama manteniéndose a media altura, donde era rico en pastos en primavera sin llegar a estar cubierto de nieve. Y tan pronto baja a un rio, donde abrevaba el rebaño, como subía a un otero para evitar un paso frecuentado por lobos. Me temo que la nueva autovía no respetará este trazado original, por lo que ya quedan pocas oportunidades de recorrerla.

Ya tenía clara la vuelta, ahora tenía que estudiar la ida. Porque cuando vas en moto, ir y volver por el mismo camino, es una pérdida de oportunidades de conocer carreteras. Está claro que en moto lo que importa es el camino, y cuantos más hagas mejor.